1.905 Desde
finales el s. XVII, se van sucediendo distintas disposiciones que prohíben la
utilización de los cementerios en el interior de las ciudades. En Valencia los
enterramientos se realizaban de forma generalizada en los cementerios
parroquiales, hasta que en el año 1804 se encarga un proyecto de cementerio
general, en las afueras de la ciudad, al arquitecto municipal, y académico de
número de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos Cristóbal Sales
(1763-1833). Sobre una superficie de 3.200 m2 se dispone una avenida de entrada
desde el zaguán hasta la capilla que se bifurca en dos vías perpendiculares en
el encuentro con ésta. Una importante ampliación, sin duda la de mayor alcance
arquitectónico se debe probablemente al arquitecto José Calvo Tomás (1830-1903)
que proyecta un interesante pórtico dórico, con columnas estriadas de piedra
natural, para alojar nuevos nichos, de posible influencia italiana. Las nuevas
galerías porticadas se pavimentaron con losas de rodeno. Destacan los panteones
de Llovera, de forma piramidal, de Antonio Martorell Trilles (1845-1931) autor
de una treintena de mausoleos, o de la familia Jura Real, decididamente
goticista, como el particular medievalismo de José Manuel Cortina (1868-1950)
uno de los mas destacados arquitectos de la segunda mitas del XIX y primeras
décadas del XX. Texto extraído de la "Guía de Arquitectura de
Valencia". (Fototipia Lacoste)
No hay comentarios:
Publicar un comentario